domingo, 22 de diciembre de 2013

BELÉN o NACIMIENTO. NAVIDAD 2013


NACIMIENTO DEL NIÑO JESÚS





ORIGEN DEL PRIMER BELÉN
El primer Belén o Nacimiento, es una tradición introducida al Nuevo Mundo por los frailes, probablemente franciscanos, durante la colonización y evangelización ibérica a partir del siglo XV y XVI.

Los orígenes de esta costumbre de reproducir en imágenes el nacimiento de Jesús, se remonta al siglo XIII, por iniciativa de San Francisco de Asís. Se dice que, mientras predicaba por la campiña de Rieti Italia, le sorprendió el crudo invierno al humilde predicador que vestía con harapos. Se refugió en la ermita de Greccio. Era entonces, la Navidad del año 1223.


Mientras oraba, rodeado de aquella paz del bosque y meditando la lectura del evangelista San Lucas tuvo la inspiración de reproducir en vivo el misterio del nacimiento de Jesús en Belén. 


Construyó una casita de paja a modo de portal, puso un pesebre en su interior, trajo un buey y un asno de los campesinos del lugar, e invitó a un pequeño grupo de ellos a reproducir la escena de la adoración de los pastores.
 

El Papa Honorio III, concedió indulgencia a todos los que asistieron a la ceremonia, y el heno que se utilizó en el pesebre, sirvió para curar a personas y animales.



Este es el origen del primer Belén o Nacimiento, que lo hizo San Francisco de Asís, cuya idea principal, es explicar con todo detalle el porqué y el cómo, el Salvador del mundo se hizo hombre.

La hermosa idea se propagó por toda Italia, luego a España y al resto de la Europa católica. En Nápoles, hacia finales del siglo XV, reprodujeron en figuras de barro a los actores del gran acontecimiento narrado por el Evangelista San Lucas, en su capítulo 2, versículo 2 al 14 que nos narra el nacimiento de Jesús:


NACIMIENTO DE JESÚS

En esos días, el emperador dictó una ley que ordenaba hacer un censo en todo el Imperio.
Todos iban a inscribirse a sus respectivas ciudades. También José, como era descendiente de David, salió de la ciudad de Nazaret de Galilea y subió a Judea, a la ciudad de David, llamada Belén, para inscribirse con María, su esposa, que estaba embarazada.

Cuando estaban en Belén, le llegó el día en que debía tener su hijo. Y dio a luz a su primogénito, lo envolvió en pañales y lo acostó en un pesebre, poque no había lugar para ellos en ningún otro lugar.

En la región había unos pastores que vivían en el campo, y que por la noche se turnaban para cuidar sus rebaños. 


De repente, un ángel del cielo se les apareció y les dijo: "No teman, porque yo vengo a comunicarles una buena nueva que será motivo de mucha alegría para todo el pueblo. Hoy nació, en la ciudad de David, un Salvador que es Cristo Señor. En esto lo reconocerán: hallarán a un niño recién nacido, envuelto en pañales y acostado en un pesebre". 

De pronto aparecieron otros ángeles y todos alababan a Dios, diciendo: "Gloria a Dios en lo más alto del cielo, y en la tierra, gracia y paz a los hombres".



Después que los ángeles volvieron al cielo, los pastores comenzaron a decirse unos a otros: "Vamos, pues, hasta Belén y veamos lo que ha sucedido y que el Señor nos dio a conocer". 

Fueron apresuradamente y hallaron a María, a José y al niño Jesús, acostado en el pesebre.Entonces contaron lo que los ángeles les habían dicho, y todos se maravillaron de lo que decían los pastores. 


María, por su parte, observaba cuidadosamente todos estos acontecimientos y los guardaba en su corazón.
Después los pastores se fueron glorificando y alabando a Dios, porque todo lo que habían visto y oído era tal como se lo habían anunciado.


DE ORIENTE VIENEN UNOS MAGOS
Habiendo nacido Jesús en Belén de Judá, durante el reinado de Herodes, vinieron unos Magos de Oriente a Jerusalén, preguntando: "¿Dónde está el rey de los judíos que ha nacido?, porque hemos visto su estrella en Oriente y venimos a adorarlo". Herodes y todo Jerusalén quedaron muy intranquilos con la noticia. Reunió al rey, a todos los sacerdotes principales y a los maestros de la Ley para preguntarles dónde debía nacer el Cristo. Ellos le contestaron que en Belén de Judá, ya que así lo anunció el profeta que escribió:

 "Belén tierra de Judá, tú no eres el más pequeño entre los principales pueblos de Judá, porque de ti saldrá un jefe, el pastor de mi pueblo Israel."

Herodes, entonces, llamó privadamente a los Magos para saber la fecha exacta en que se les había aparecido la estrella. Encaminándose a Belén les dijo: "Vayan y averiguen bien lo que se refiere este niño: Cuando lo hayan encontrado avísenme para ir yo también a adorarlo".

Después de todo esto, los magos prosiguieron su camino. La estrella que habían visto en Oriente iba delante de ellos, hasta que se paró sobre el lugar en que estaba el niño. Al ver la estrella, se alegraron mucho, y habiendo entrado en la casa hallaron al niño que estaba con María, su madre. Se postraron para adorarlo y, abriendo sus cofres, le ofrecieron regalos: oro, incienso y mirra. Luego regresaron a su país por otro camino, porque un ángel, en sueños, les advirtió de que no volvieran donde Herodes.

Esa noche, un ángel se apareció a José para avisarle de las intenciones de Herodes de matar a Jesús. José entonces, huyó a Egipto con María y su Hijo. Cuando Herodes murió, volvieron a Nazaret, donde el pequeño niño Dios creció, admirando a cuantos le conocían.


TRADICIÓN EN LOS HOGARES
Esta tradición de poner el nacimiento o belén en los hogares, fue acogida con gran cariño y se ha extendido por todo el mundo desde el siglo XVI.

Poner un nacimiento en casa, en el que podemos contemplar la imagen de Belén, el pesebre, los pastores, los magos, la estrella, los ángeles, José y María, puede ser una actividad que fomenta la unión familiar. Y al mismo tiempo, convertirse en una imagen que nos ayude a meditar en el misterio de la Navidad y en las virtudes de cada uno de los personajes. A través de nuestros sentidos, se eleva nuestro espíritu ante este gran acontecimiento.




"El Nacimiento nos invita a reflexionar 
el gran misterio de Dios 
hecho hombre por amor al hombre"


FELICES PASCUAS