La Virgen de la Almudena, o Nuestra Señora de la Almudena es una advocación mariana de la Virgen María. Es la patrona de la ciudad de Madrid y de la Provincia eclesiástica de Madrid, siendo venerada en la Catedral de Santa María de la Almudena. Su festividad se celebra el 9 de Noviembre.
HISTORIA DE LA VIRGEN DE LA ALMUDENA
El origen de la imagen de la Virgen, que con el tiempo se llamaría Santa María la Real de la Almudena llega hasta la generación apostólica y con ella la devoción que siempre ha tenido entre los madrileños.
Cuenta la leyenda que fue traída a España por el Apóstol Santiago cuando vino a predicar el Evangelio, y dicen que la pintó San Lucas y la talló Nicodemus. En Madrid, la pequeña villa que luego habría de ser capital de España, se veneró desde siempre como Patrona una imagen de la Madre de Dios denominada "Santa María de la Vega" o de "La Concepción Admirable."
Cuenta la tradición que a comienzos del Siglo VIII, ante la inminencia de la invasión sarracena ocurrida entre los años 711 a 714, los cristianos de la villa para evitar la profanación de la imagen, escondieron a la Señora en un cubo de la muralla; trescientos años después los árabes fueron expulsados de nuestro país.
En 1083-1085 siendo Pontífice Gregorio VII, al conquistar Magerit el rey Alfonso VI, convocó una procesión encabezada por él mismo, y al llegar junto al cubo de la muralla cercano a la Almudayna unas piedras se derrumbaron y en el hueco estaba la imagen de la Virgen con los dos cirios encendidos. Este es el motivo por el que la Virgen lleva el nombre de Almudena, que significa muralla o ciudad. Era el 9 de noviembre del año 1085, y desde entonces la Virgen ha sido considerada como la patrona de Madrid.
En 1083-1085 siendo Pontífice Gregorio VII, al conquistar Magerit el rey Alfonso VI, convocó una procesión encabezada por él mismo, y al llegar junto al cubo de la muralla cercano a la Almudayna unas piedras se derrumbaron y en el hueco estaba la imagen de la Virgen con los dos cirios encendidos. Este es el motivo por el que la Virgen lleva el nombre de Almudena, que significa muralla o ciudad. Era el 9 de noviembre del año 1085, y desde entonces la Virgen ha sido considerada como la patrona de Madrid.
Según esta tradición el Rey Alfonso VI hasta la localización de la imagen habría mandado pintar en el muro de la Iglesia de la Villa una imagen. Esa imagen sería la conocida hoy en día de "la Virgen de la Flor de lis". Cuenta esta leyenda que los rasgos estaban inspirados en su esposa Doña Constanza y que sostiene una imagen de flor de lis en su mano puesto que Doña Constanza era francesa. Esta imagen es una pintura mural probablemente de fines del siglo XII o principios del siglo XIII y muestra a la Virgen con el Niño y con una flor de Lis en la mano. Bajo sus pies una Cruz roja similar a la de la Orden de Calatrava. Seguramente tras la consagración del templo (ya que había sido utilizada como mezquita) se pintó una imagen de la Virgen con el lirio (probablemente símbolo de pureza de María), muy utilizado como ornamento decorativo por los visigodos y más tarde por los mozárabes.
En 1638 se arrancó el bloque de yeso de 10 cm. de espesor sobre el que está pintada la imagen y se trasladó a otro lugar de la iglesia. En 1868 cuando se derribó la Iglesia de Santa María, pasó a la del Santísimo Sacramento y desde allí definitivamente a la Cripta donde hoy se venera. La Virgen de la Flor de Lis es actualmente Patrona de los jardineros.
En 1638 se arrancó el bloque de yeso de 10 cm. de espesor sobre el que está pintada la imagen y se trasladó a otro lugar de la iglesia. En 1868 cuando se derribó la Iglesia de Santa María, pasó a la del Santísimo Sacramento y desde allí definitivamente a la Cripta donde hoy se venera. La Virgen de la Flor de Lis es actualmente Patrona de los jardineros.
LA IMAGEN
La talla actual de la Virgen de la Almudena es de madera de pino dorada y policromada, y sostiene al Niño en sus brazos y data seguramente de finales del siglo XV o principios del XVI, fue realizada por un escultor relacionado con el maestro Diego Copín de Toledo o por él mismo tal y como afirmaron José Manuel Azcárate y Francisco Portela; sustituyó a la anterior que aparece citada en algunas crónicas y cuya imagen es probablemente la que aparece pintada en el arcón de San Isidro que se encuentra en la Capilla de la Catedral dedicada a San Isidro, y que podría haber sustituido a una primitiva que se habría quemado en tiempos de enrique IV (1425-1474).
Esta imagen de Santa María la Real de la Almudena, estuvo vestida desde 1626. Durante este tiempo recibió gran cantidad de vestidos y mantos, regalo de distintas Reinas de España, que se conservan en el Museo Catedral; pero el 18 de junio de 1890,por disposición del entonces Obispo de Madrid Don Ciriaco Sancha, la Virgen salió en la Procesión del Corpus desposeída de sus vestiduras de tela.
La imagen actual de la Virgen de la Almudena fue coronada solemnemente el 10 de Noviembre de 1948 y declarada patrona de la diócesis de Madrid por el Papa Pablo VI el 1 de julio de 1977. También hoy, a cualquier hora del día y de la noche, se venera cariñosamente por los madrileños la imagen en piedra de Nuestra Señora de la Almudena situada en los muros del complejo catedralicio.
La imagen que se conserva actualmente en la catedral de Madrid es de estilo gótico tardío, realizada entre los siglos XV y XVI. Representa a María como reina con túnica rojiza y rico manto recamado, con vuelta en color azul, que cubre sus hombros y cae en pliegues tubulares por delante. Sostiene al Niño desnudo, con ambas manos. Es una talla de buena calidad artística, en madera dorada y policromada.
Santa María es la imagen de la mujer nueva en la Historia de la Salvación. La Virgen María junto a la cruz, nos enseña a ser fieles. Con Ella estaban el discípulo fiel y las mujeres fieles, que no huyeron ni se acobardaron y nos fue dada como Madre desde la cruz. Permaneció fiel durante toda su vida al plan de Dios, desde la Anunciación y la Encarnación del Verbo hasta el Calvario. La Santa María, que amparó bajo su manto a la Iglesia naciente para que no se dispersara y permaneciera fiel en la oración para el apostolado, hoy también nos protege para que, sólo con mirarla, mostremos la disposición para mantener nuestra fidelidad y después con su protección la prolonguemos en cada generación.
Madre y Señora nuestra,
que estuviste oculta
en las murallas del viejo Madrid
y te nos manifiestas ahora
como Madre de inmensa ternura
a quienes te veneramos
con filial devoción.
Como excelsa Patrona de Madrid
bendice y protege
tu nombre santo y el de tu Hijo.
Que vive y reina por los
siglos de los siglos.
Amén