sábado, 15 de diciembre de 2012

NAVIDAD

 EL ÁRBOL DE NAVIDAD


El Árbol de Navidad,  nos trae a la memoria el árbol del Paraíso, de cuyo fruto comieron Adán y Eva desobedeciendo a Dios.



El árbol entonces nos recuerda el origen de nuestra desgracia: el pecado. 



Y nos recuerda que el  Niño que va a nacer de Santa María, es el Mesías prometido que viene a traernos el don de la reconciliación.



LAS BOLAS NAVIDEÑAS


Evocan el fruto del árbol del Paraíso. Nos recuerdan que Jesús es el auténtico fruto que nos puede salvar y que nos trae, el ser semejantes a Dios.





LAS LUCES


Nos recuerdan que el Señor Jesús es la luz del mundo, que ilumina nuestra vidas, sacándonos de las tinieblas del pecado y guiándonos en nuestro peregrinar hacia la Casa del Padre.



LA ESTRELLA

Al igual que en Belén, hace dos mil un años, una estrella se detuvo sobre el lugar donde estaba el niño Jesús, con María su Madre, causando este acontecimiento una gran alegría en los Reyes Magos. Hoy una estrella corona nuestro árbol recordándonos que el acontecimiento del nacimiento de Jesús, ha traído la verdadera alegría a nuestras vidas.



LOS REGALOS


Colocados a los pies del árbol, simbolizan aquellos dones con los que los Reyes Magos adoraron al Niños Dios.  Además, nos recuerdan que, tanto amó Dios Padre al mundo que le entregó (le regaló), a su único hijo para que todo el que crea en Él tenga vida eterna.




RITO DE BENDICIÓN DEL ÁRBOL NAVIDEÑO

Todos los presentes, santiguándose, dicen:

En el nombre del padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

El padre de familia dice:

Bendito sea Dios,
Padre de nuestro Señor, Jesucristo,
Que nos ha bendecido con toda clase de bendiciones espirituales.
En los cielos, en Cristo.

Todos responden:

Bendito sea el Señor por los siglos.



LECTURA

Uno de los presentes, lee el siguiente texto de la Sagrada Escritura:

Escuchemos con atención:

"Vendrá a ti, Jerusalén, el orgullo del Líbano, con el ciprés y el abeto y el pino, para adornar el lugar de mi santuario y ennoblecer mi estado".


ORACIÓN DE BENDICIÓN

Luego el padre de familia, con las manos juntas, dice la oración de bendición,

Oremos

Bendito seas, Señor y Padre nuestro,
Que nos concedes recordar con fe
En estos días de Navidad.
Los misterios del nacimiento del Señor Jesús.
Concédenos, a quienes hemos adornado este árbol
Y lo hemos embellecido con luces,
Con la ilusión de celebrar
la Navidad del nuevo milenio
Que podamos vivir también a la luz de los ejemplos
De la vida plena de tu Hijo
Y ser enriquecidos con las virtudes
Que resplandecen en su santa infancia.
Gloria a Él por los siglos de los siglos.


Todos responden:
Amén.

Al final, todos los presentes, santiguándose, dicen:

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.





FELIZ NAVIDAD