VIACRUCIS
"Camino de la Cruz"
"Camino de la Cruz"
Viacrucis significa "Camino de la Cruz" y
se refiere a las diferentes etapas o momentos vividos por Jesús desde
el momento en que fue hecho prisionero hasta su muerte en la cruz y su
posterior resurrección. Por ello, Viacrucis, también se usa comúnmente
para expresar todo tipo de dificultades que se presentan en la vida
cuando se quieren alcanzar ciertos objetivos. También "Vía Dolorosa".
Se
trata de un acto de piedad, un camino de oración que busca adentrarnos
en la meditación de la Pasión y muerte de Nuestro Señor Jesucristo en su
camino al Calvario. El camino se representa con una serie de catorce recuerdos de la Pasión, denominadas "estaciones" correspondientes a
incidentes particulares que Jesús sufrió por la salvación de la
humanidad.
HISTORIA
Desde el siglo doce los peregrinos escriben sobre la "Vía Sacra", como una ruta por la que pasaban recordando la Pasión. No se sabe cuándo surgieron las Estaciones según las conocemos hoy, ni cuando se les comenzó a conceder indulgencias pero probablemente fueron los Franciscanos los primeros en establecer el Vía Crucis ya que a ellos se les concedió en 1342 la custodia de los lugares más preciados de Tierra Santa. Tampoco está claro en que dirección se recorrían ya que, según parece, hasta el siglo XV muchos lo hacían comenzando en el Monte Calvario y retrocediendo hasta la casa de Pilato.
Probablemente su origen, tal como lo conocemos hoy, provenga del dominico Álvaro de Córdoba, que es beato, ya que en la ciudad onubense, a mitad del siglo XV representó cada uno de los momentos e invitó a los fieles a recordar la Pasión del Señor.
Comprendiendo la dificultad de peregrinar a la Tierra Santa, el Papa Inocencio XI en 1686 concedió a los franciscanos el derecho de erigir Estaciones en sus iglesias y declaró que todas las indulgencias anteriormente obtenidas por devotamente visitar los lugares de la Pasión del Señor en Tierra Santa las podían en adelante ganar los franciscanos y otros afiliados a la orden haciendo las Estaciones de la Cruz en sus propias iglesias según la forma acostumbrada. Inocente XII confirmó este privilegio en 1694 y Benedicto XIII en 1726 lo extendió a todos los fieles. En el año 1731 Clemente XII lo extendió aún más permitiendo las indulgencias en todas las iglesias siempre que las Estaciones fueran erigidas por un padre franciscano con la sanción del ordinario (obispo local). Y fijó definitivamete en catorce el número de estaciones. Benedicto XIV en 1742 exhortó a todos los sacerdotes a enriquecer sus iglesias con el rico tesoro de la Estaciones de la Cruz.
En el año 1773 Clemente XIV concedió la misma indulgencia, bajo ciertas circunstancias, a los crucifijos bendecidos para el rezo de las Estaciones, para el uso de los enfermos, los que están en el mar, en prisión u otros impedidos de hacer las Estaciones en la iglesia. La condición es que sostengan el crucifijo en sus manos mientras rezan Padre Nuestro, el Ave María y el Gloria un número determinado de veces. Estos crucifijos especiales no pueden venderse, ni prestarse, ni regalarse sin perder las indulgencias ya que son propias para personas en situaciones especiales. En 1862 los obispos obtuvieron permiso para erigir las Estaciones ya sea personalmente o por delegación siempre que fuese dentro de su propia diócesis.
HISTORIA
La
costumbre de rezar las Estaciones de la Cruz posiblemente comenzó en
Jerusalén. Ciertos lugares de la Vía Dolorosa (aunque no se llamó así
antes del siglo XVI) fueron reverentemente marcados desde los primeros
siglos. Hacer allí las "Estaciones de la Cruz" se convirtió en la meta de
muchos peregrinos desde la época del emperador Constantino (Siglo IV).
Desde el siglo doce los peregrinos escriben sobre la "Vía Sacra", como una ruta por la que pasaban recordando la Pasión. No se sabe cuándo surgieron las Estaciones según las conocemos hoy, ni cuando se les comenzó a conceder indulgencias pero probablemente fueron los Franciscanos los primeros en establecer el Vía Crucis ya que a ellos se les concedió en 1342 la custodia de los lugares más preciados de Tierra Santa. Tampoco está claro en que dirección se recorrían ya que, según parece, hasta el siglo XV muchos lo hacían comenzando en el Monte Calvario y retrocediendo hasta la casa de Pilato.
Probablemente su origen, tal como lo conocemos hoy, provenga del dominico Álvaro de Córdoba, que es beato, ya que en la ciudad onubense, a mitad del siglo XV representó cada uno de los momentos e invitó a los fieles a recordar la Pasión del Señor.
Comprendiendo la dificultad de peregrinar a la Tierra Santa, el Papa Inocencio XI en 1686 concedió a los franciscanos el derecho de erigir Estaciones en sus iglesias y declaró que todas las indulgencias anteriormente obtenidas por devotamente visitar los lugares de la Pasión del Señor en Tierra Santa las podían en adelante ganar los franciscanos y otros afiliados a la orden haciendo las Estaciones de la Cruz en sus propias iglesias según la forma acostumbrada. Inocente XII confirmó este privilegio en 1694 y Benedicto XIII en 1726 lo extendió a todos los fieles. En el año 1731 Clemente XII lo extendió aún más permitiendo las indulgencias en todas las iglesias siempre que las Estaciones fueran erigidas por un padre franciscano con la sanción del ordinario (obispo local). Y fijó definitivamete en catorce el número de estaciones. Benedicto XIV en 1742 exhortó a todos los sacerdotes a enriquecer sus iglesias con el rico tesoro de la Estaciones de la Cruz.
En el año 1773 Clemente XIV concedió la misma indulgencia, bajo ciertas circunstancias, a los crucifijos bendecidos para el rezo de las Estaciones, para el uso de los enfermos, los que están en el mar, en prisión u otros impedidos de hacer las Estaciones en la iglesia. La condición es que sostengan el crucifijo en sus manos mientras rezan Padre Nuestro, el Ave María y el Gloria un número determinado de veces. Estos crucifijos especiales no pueden venderse, ni prestarse, ni regalarse sin perder las indulgencias ya que son propias para personas en situaciones especiales. En 1862 los obispos obtuvieron permiso para erigir las Estaciones ya sea personalmente o por delegación siempre que fuese dentro de su propia diócesis.
REALIZACIÓN DEL VIACRUCIS
El Vía Crucis se reza de pie y en algunos momentos de rodillas. Debe hacerse caminando, deteniéndose en cada estación, para recordar el camino de Jesús al Calvario. Es por eso que las imágenes de la representación del Vía Crucis están en la pared, alrededor del templo. Si se reza en casa, ayuda tener a mano imágenes de la Pasión y Muerte del Señor, para que puedas recordar e imaginar el dolor redentor de nuestro señor Jesucristo.
La costumbre es hacer un recorrido grupal que puede tener lugar dentro del templo o por las calles, deteniéndose en cada estación y haciendo una oración en cada estación, una lectura de algún pasaje del evangelio y también un canto. En los monasterios normalmente se encuentra el vía crucis en el claustro.
Al rezar el Vía Crucis, recordamos con amor y agradecimiento lo mucho que Jesús sufrió por salvarnos del pecado durante su pasión y muerte. Dicho camino se representa mediante 15 imágenes de la Pasión de Jesucristo, que se llaman "estaciones". Te animarás a cargar con las cruces de cada día, si recuerdas con frecuencia las estaciones o pasos de Jesús hasta el Calvario.
ESTACIONES
La forma tradicional de esta práctica piadosa es ésta:
* Primera Estación: Jesús es condenado a muerte
* Segunda Estación: Jesús carga la cruz
* Tercera Estación: Jesús cae por primera vez
* Cuarta Estación: Jesús encuentra a su madre María
* Quinta Estación: Simón el Cirineo ayuda a Jesús a llevar la cruz
* Sexta Estación: Verónica limpia el rostro de Jesús
* Séptima Estación: Jesús cae por segunda vez
* Octava Estación: Jesús consuela a las mujeres de Jerusalén
* Novena Estación: Jesús cae por tercera vez
* Décima Estación: Jesús es despojado de sus vestiduras
* Undécima Estación: Jesús es clavado en la cruz
* Duodécima Estación: Jesús muere en la cruz
* Decimotercera Estación: Jesús es descendido de la cruz y puesto en brazos de María, su madre.
* Decimocuarta Estación: Jesús es sepultado.
REFORMA DE JUAN PABLO II
El nuevo Vía Crucis, con 15 estaciones es:
Te adoramos Señor y te bendecimos, porque por tu santa cruz redimiste al mundo.
Oh Padre, abre nuestros corazones a la aceptación de tu voluntad para que tengamos la fuerza de velar, y para que la participación en sus sufrimientos nos permita experimentar la fuerza de su resurrección.
Señor, pequé, ten piedad y misericordia de mi.
Reza Padrenuestro
Te adoramos Señor y te bendecimos, porque por tu santa cruz redimiste al mundo.
Señor, pequé, ten piedad y misericordia de mi.
Te adoramos Señor y te bendecimos, porque por tu santa Cruz redimiste al mundo.
Padre perdónanos, muchas veces hemos tratado la fe como algo que nos pertenece, algo nuestro, como un privilegio nuestro; es tu gracia la que nos permite reconocer a Jesús como el verdadero Cristo, Tu hijo, nuestro Señor; perdónanos también por haber rechazado a tu pueblo, por haberlo ofendido, incluso en tu liturgia.
Señor, pequé, ten piedad y misericordia de mi.
Reza Padrenuestro
*Cuarta Estación: "Jesús es negado por Pedro"
Te adoramos Señor y te bendecimos, porque por tu santa Cruz redimiste al mundo.
Oh Jesús, no dejes de rezar por nosotros, no nos abandones cuando nos alejemos de Ti; que tu bondadosa mirada nos acompañe y nos haga volver a ti, siempre.
Señor, pequé, ten piedad y misericordia de mi.
*Quinta Estación: "Jesús es condenado a muerte por Pilato"
Te adoramos Señor y te bendecimos, porque por tu santa cruz redimiste al mundo.
Que yo comprenda, Señor, el valor de la Cruz, de mis pequeñas cruces de cada día, de mis dolencias, de mi soledad.
Dame convertir en ofrenda amorosa, en reparación por mi vida y en apostolado por mis hermanos, mi cruz de cada día.
Señor, pequé, ten piedad y misericordia de mi.
Reza Padrenuestro
*Octava Estación: "Jesús es ayudado por Simón el Cirineo a llevar la cruz"
Te adoramos Señor y te bendecimos, porque por tu santa cruz redimiste al mundo.
Cada uno de nosotros tenemos nuestra vocación, hemos venido al mundo para lograr algo concreto, para realizarnos de una manera particular. ¿Cuál es la mía y cómo la llevo a cabo? Pero hay algo, Señor, que es misión mía y de todos: la de ser Cirineo de los demás, la de ayudar a todos.
Señor, pequé, ten piedad y misericordia de mi
Reza Padrenuestro
*Duodécima Estación: "Jesús en cruz, su madre y el discípulo"
Te adoramos Señor, y te bendecimos, porque por tu santa cruz redimiste al mundo.
Déjame estar a tu lado, Madre, especialmente en estos momentos de tu dolor incomparable. Déjame estar a tu lado. Más te pido: que hoy y siempre me tengas cerca de Ti y te compadezcas de mí.
¡Mírame con compasión, no me dejes, Madre mía!
*Decimocuarta Estación: "Jesús es sepultado"
Reza Padrenuestro
Víacrucis, "camino de la cruz" , un acto de piedad, un camino de oración que se busca con la meditación de la Pasión y Muerte de Jesucristo en su camino al Calvario.
REFORMA DE JUAN PABLO II
El
Viernes Santo del año 1991, y bajo el auspicio de Juan Pablo II, se
creó un nuevo Viacrucis con 15 estaciones (el Papa añadió una nueva
estación), basadas todas ellas en momentos del Nuevo Testamento, ya que
el anterior recogía muchos pasajes de los Evangelios apócrifos entre los
que se encontraban el encuentro de Jesús con María, su madre y el acto
en el que la Santa Mujer Verónica le enjuga el rostro a Jesús. Este
nuevo viacrucis comienza con la oración de Jesús en el huerto de
Getsemaní y finaliza con la Resurrección de Cristo. Era un intento de
acercar ecuménicamente a todas las confesiones cristianas.
El nuevo Vía Crucis, con 15 estaciones es:
*Primera Estación: "Jesús en el huerto de los Olivos"
Te adoramos Señor y te bendecimos, porque por tu santa cruz redimiste al mundo.
Oh Padre, abre nuestros corazones a la aceptación de tu voluntad para que tengamos la fuerza de velar, y para que la participación en sus sufrimientos nos permita experimentar la fuerza de su resurrección.
Señor, pequé, ten piedad y misericordia de mi.
Reza Padrenuestro
*Segunda Estación: "Jesús, traicionado por Judas, es arrestado"
Y tus discípulos, donde están? Huyen todos. Señor, Tú has aceptado la
prueba y el abandono de tus amigos más íntimos. Ayúdanos a
mantenernos en pie siempre, en cualquier situación sin cerrar el
corazón al Amor.
Señor, pequé, ten piedad y misericordia de mi.
Rezar Padrenuestro
*Tercera Estación: "Jesús es condenado por el Sanedrín"
Te adoramos Señor y te bendecimos, porque por tu santa Cruz redimiste al mundo.
Padre perdónanos, muchas veces hemos tratado la fe como algo que nos pertenece, algo nuestro, como un privilegio nuestro; es tu gracia la que nos permite reconocer a Jesús como el verdadero Cristo, Tu hijo, nuestro Señor; perdónanos también por haber rechazado a tu pueblo, por haberlo ofendido, incluso en tu liturgia.
Señor, pequé, ten piedad y misericordia de mi.
Reza Padrenuestro
*Cuarta Estación: "Jesús es negado por Pedro"
Te adoramos Señor y te bendecimos, porque por tu santa Cruz redimiste al mundo.
Oh Jesús, no dejes de rezar por nosotros, no nos abandones cuando nos alejemos de Ti; que tu bondadosa mirada nos acompañe y nos haga volver a ti, siempre.
Señor, pequé, ten piedad y misericordia de mi.
Reza Padrenuestro
*Quinta Estación: "Jesús es condenado a muerte por Pilato"
Sentenciado y no por un tribunal, sino por todos. Condenado por los mismos que le habían aclamado poco antes. Y Él calla.
Nosotros huimos de ser reprochados. Y saltamos inmediatamente...
Dame Señor la fuerza para imitarte, uniéndome a Ti por el Silencio cuando alguien me haga sufrir. ¡Ayúdame!
Señor pequé, te piedad y misericordia de mí.
Reza Padrenuestro
*Sexta Estación: "Jesús es flagelado y coronado de espinas"
Oh Padre, Tú has creado al hombre a tu imagen y semejanza; en la
persona de Jesús nos manifiestas tu imagen perfecta. Que el Espíritu nos
ayude a asemejarnos cada vez mas a la imagen de Tu Hijo y nos enseñe a
descubrir tu rostro tal como se manifiesta en el rostro de los
torturados y humillados de este mundo.
Señor, pequé, ten piedad y misericordia de mi.
Reza Padrenuestro
*Séptima Estación: "Jesús carga la cruz"
Te adoramos Señor y te bendecimos, porque por tu santa cruz redimiste al mundo.
Que yo comprenda, Señor, el valor de la Cruz, de mis pequeñas cruces de cada día, de mis dolencias, de mi soledad.
Dame convertir en ofrenda amorosa, en reparación por mi vida y en apostolado por mis hermanos, mi cruz de cada día.
Señor, pequé, ten piedad y misericordia de mi.
Reza Padrenuestro
*Octava Estación: "Jesús es ayudado por Simón el Cirineo a llevar la cruz"
Cada uno de nosotros tenemos nuestra vocación, hemos venido al mundo para lograr algo concreto, para realizarnos de una manera particular. ¿Cuál es la mía y cómo la llevo a cabo? Pero hay algo, Señor, que es misión mía y de todos: la de ser Cirineo de los demás, la de ayudar a todos.
Señor, pequé, ten piedad y misericordia de mi
Reza Padrenuestro
*Novena Estación: "Jesús consuela a las mujeres de Jerusalén"
Muchas veces, tendríamos que analizar la causa de las lágrimas, de los
pesares, de las preocupaciones. Tal vez hay en ellos un fondo de
orgullo, de amor propio mal entendido, de egoísmo, de envidia.
Debería
llorar por mi falta de correspondencia a tus innumerables beneficios de
cada día, que me manifiestan, Señor, cuánto me quieres.
Dame profunda gratitud y correspondencia a tu misericordia.
Señor, pequé, ten piedad y misericordia de mí.
Reza un Padrenuestro
*Décima Estación: "Jesús es crucificado"
Te adoramos Señor, y te bendecimos, porque por tu santa cruz redimiste al mundo.
Señor,
que yo disminuya mis limitaciones con mi esfuerzo y así pueda ayudar a
mis hermanos. Y que cuando mi esfuerzo no consiga disminuirlas, me
esfuerce en ofrecértelas también por ellos.
Señor, pequé, ten piedad y misericordia de mí.
Reza Padrenuestro
*Undécima Estación: "Jesús promete su reino al buen ladrón"
Te adoramos Señor, y te bendecimos, porque por tu santa cruz redimiste al mundo.
El buen ladrón reconoció al Señor, precisamente en la cruz. Algunos no lo reconocieron cuando hizo milagros.
En su corazón creyó, con la lengua confesó su fe. Le dijo: "Acuérdate de mi cuando llegues a tu reino".
El paraíso tiene árboles de felicidad: hoy estarás conmigo en el madero de la cruz; hoy también estarás conmigo en el árbol de la salvación.
Señor, pequé, ten piedad y misericordia de mi.
Reza Padrenuestro
El buen ladrón reconoció al Señor, precisamente en la cruz. Algunos no lo reconocieron cuando hizo milagros.
En su corazón creyó, con la lengua confesó su fe. Le dijo: "Acuérdate de mi cuando llegues a tu reino".
El paraíso tiene árboles de felicidad: hoy estarás conmigo en el madero de la cruz; hoy también estarás conmigo en el árbol de la salvación.
Señor, pequé, ten piedad y misericordia de mi.
Reza Padrenuestro
*Duodécima Estación: "Jesús en cruz, su madre y el discípulo"
Te adoramos Señor, y te bendecimos, porque por tu santa cruz redimiste al mundo.
Déjame estar a tu lado, Madre, especialmente en estos momentos de tu dolor incomparable. Déjame estar a tu lado. Más te pido: que hoy y siempre me tengas cerca de Ti y te compadezcas de mí.
¡Mírame con compasión, no me dejes, Madre mía!
Señor, pequé, ten piedad y misericordia de mí.
Reza Padrenuestro
*Decimotercera Estación: "Jesús muere en la cruz"
Te adoramos Señor, y te bendecimos, porque por tu santa cruz redimiste al mundo.
Te
adoro, mi Señor, muerto en la Cruz por Salvarme. Te adoro y beso tus
llagas, las heridas de los clavos, la lanzada del costado...
Has
muerto por salvarnos. Déjame responder a tu amor con amor, cumplir tu
voluntad, trabajar por mi salvación ayudado de tu gracia.
Señor, pequé, ten piedad y misericordia de mí.
Reza Padrenuestro *Decimocuarta Estación: "Jesús es sepultado"
Te adoramos Señor y te bendecimos porque por tu santa cruz redimiste al mundo.
Todo
ha terminado. Pero no: después de la muerte, la Resurrección. Enséñame a
ver lo transitorio y pasajero, a la luz de lo que perdura. Y que esa
luz ilumine todos mis actos. Así sea.
Señor, pequé, ten piedad y misericordia de mí.
Reza Padrenuestro
*Decimoquinta Estación: "Jesús resucita de entre los muertos"
¿Por qué buscáis entre los muertos al que está vivo? No está aquí, ha resucitado.
Unas
piadosas mujeres fueron al sepulcro de Jesús muy temprano. El anuncio
de la resurrección convierte su tristeza en alegría. Jesús está vivo y
nosotros vivimos en Él para siempre. La Resurrección de Cristo inaugura
para la humanidad una renovada primavera de esperanza.
Jesús, enséñame a mantener siempre la esperanza.
Señor, pequé, ten piedad y misericordia de mi.
Reza Padrenuestro
Víacrucis, "camino de la cruz" , un acto de piedad, un camino de oración que se busca con la meditación de la Pasión y Muerte de Jesucristo en su camino al Calvario.
Perdónanos Jesús, y permítenos
que te acompañemos en este viaje.
Jesús nuestro.
Queremos vivir siempre y morir unidos a ti,
para resucitar a la vida eterna.
"La cruz es el camino a la gloria,
el camino a la luz"
el camino a la luz"