HISTORIA
El 8 de diciembre se celebra la Inmaculada Concepción de María, patrona de España. En 1854, el Papa Pío IX promulgó un documento llamado "Ineffabilis Deus" en el que estableció que el alma de María, en el momento en que fue concebida por sus padres, estaba adornada con la gracia santificante. Dios preservó inmune a la Virgen de toda mancha de pecado original desde el primer instante de su concepción.
María tiene un lugar muy especial dentro de la Iglesia por ser la Madre de Jesús. Solo a Ella, Dios le concedió el privilegio de haber sido preservada del pecado original, como un regalo especial para la mujer que sería la Madre de Jesús y madre Nuestra. María siempre estuvo llena de Dios para poder cumplir con la misión que Dios tenía para Ella.
La Virgen María fue "dotada por Dios con dones a la medida de su misión tan importante. El ángel Gabriel pudo saludar a María con las palabras "llena eres de gracia", porque ella estaba totalmente llena de la Gracia de Dios. Dios la bendijo con toda clase de bendiciones espirituales, más que a ninguna otra persona creada. Ella es "redimida de la manera más sublime en atención a los méritos de su Hijo"
Debemos entender, que Dios nos regala a cada uno de nosotros las gracias necesarias y suficientes para cumplir con la misión que nos ha encomendado y así seguir el camino al Cielo, fieles a su Iglesia Católica.
Es muy importante para todos nosotros recibir el Bautismo, porque todos hemos nacido con la mancha del pecado original. Al bautizarnos, recibimos la gracia santificante que borra de nuestra alma el pecado original. Además, nos hacemos hijos de Dios y miembros de la Iglesia. Para conservar limpia de pecado nuestra alma podemos acudir al Sacramento de la Confesión y de la Eucaristía, donde encontramos a Dios vivo.
La devoción a la Inmaculada Concepción es uno de los aspectos más difundidos de la devoción mariana. Tanto en Europa como en América se adoptó a la Inmaculada Concepción como patrona de muchos lugares. España celebra a la Inmaculada como patrona y protectora desde 1644, siendo el 8 de diciembre fiesta de carácter nacional, y se declaró fiesta de guardar en toda la Iglesia desde 1708 por orden del Papa Clemente XI.
Durante la celebración de dicha festividad, los sacerdotes españoles tienen el privilegio de vestir casulla azul. Este privilegio fue otorgado por la Santa Sede en 1864, como agradecimiento a la defensa del dogma de la Inmaculada Concepción que hizo España.
VIGILIA DE LA INMACULADA
La tradicional Vigilia de la Inmaculada, que tiene lugar en las parroquias y catedrales de todas las diócesis españolas cada 7 de diciembre, se consolidó en el año 1947 por iniciativa del sacerdote jesuita Tomás Morales, actualmente en proceso de canonización.
Este año, la Vigilia de la Inmaculada, lleva por lema "María, madre de la Esperanza". Una afirmación que hizo el Papa Francisco en la Jornada Mundial de la Vida Contemplativa del año pasado. La Esperanza es la virtud más necesaria en estos momentos porque hay mucho pesimismo. A pesar de la corrupción y de la inmoralidad de nuestro mundo, la esperanza nos anima a mirar al cielo, acercarnos a nuestro Madre y a reencontrarnos con la fe.
Nuestra parroquia de Sevilla la Nueva como en años anteriores, celebrará la Vigilia de la Inmaculada a las 20:00 h. en la Iglesia de Santiago Apóstol.
ORACIÓN A LA INMACULADA CONCEPCIÓN
VIRGEN MARÍA
"Santísima Virgen, yo creo y confieso
vuestra Santa e Inmaculada Concepción
pura y sin mancha.
¡Oh Purísima Virgen!, por vuestra pureza virginal,
vuestra Inmaculada Concepción y
vuestra gloriosa cualidad de Madre de Dios,
alcanzadme de vuestro amado Hijo
la humildad, la caridad,
una gran pureza de corazón
de cuerpo y de espíritu,
una santa perseverancia en el bien,
el don de la oración,
una buena vida y una santa muerte"
Amén